LUCES DORADAS del TUCUMAN

Sitio de intercambio de información sobre la actualidad, historia y cultura argentina e iberoamericana, desde la región del Tucumán (NOA - La Rioja - Córdoba), en la que tuvo especial vigencia la civilización cristiana, orgánica y mariana de la Argentina auténtica. Su Tradición viva se enriquece con el paso del tiempo. Ayúdenos a descubrir y defender nuestra identidad. E-mail: civilizacioncristianaymariana@gmail.com

Mi foto
Nombre: El Alférez
Ubicación: Noroeste, Argentina

lunes, septiembre 05, 2005



A propósito del nombre
“América”

Por José Carlos CARMINIO CASTAGNO*


En el ilustrativo artículo “¿Un gentilicio que homenajea a Amerike?” –publicado en la edición del lunes 14 de julio de 2003 de esta misma hoja[1]- se sostiene que el nombre de nuestro continente fue impuesto en honor de “el comerciante galés Richard Amerike”, expresándose el siguiente fundamento:

“El nombre de América apareció por primera vez en la Introducción a la Cosmografía del cartógrafo alemán Martín Waldsemüller en 1507, cuatro años después de la muerte de Amerike y cinco antes de la de Vespucio. Aunque Waldsemüller nunca lo dijo, desde entonces hasta hace muy poco se dio por sentado que la “Americi Terram” fue designada así por el viaje del italiano de 1502, cuando verificó que, efectivamente, se trataba de otro continente”.

Al respecto, cabe formular algunas precisiones:

a) La mencionada “Cosmographiae introductio” fue preparada en la Abadía de Saint Dié (Lorena, Francia) para publicarse integrando la versión latina de la “Geografía” de Claudio Tolomeo (100-170)
[2].
b) En dicha obra hay un mapa del cosmógrafo alemán Martín Waldsemüller –o Waltzemüller-, en el que hace mención a la opinión de Vespucio (quien jamás indicaba en sus narraciones quién era el comandante de las expediciones en las que decía haber participado.
c) El que Vespucio relata en su carta a Lorenzo de Médici –publicada en 1503
[3], vertida al latín, en París- es su viaje de 1501 [4], en el cual afirma haber recorrido desde las costas del Brasil hasta casi el estrecho interoceánico y expresa que tales tierras son un “mundus novus” [5].
d) Como es sabido, Américo Vespucio –o Amerigo Vespucci- (1454-1512) fue un comerciante florentino al servicio de los Médici y después marino, primeramente al servicio de España –recorriendo igual ruta que Colón en su tercer viaje-, luego de Portugal (como ya fue referido) y, a partir de 1504, otra vez de la Corona de Castilla –cuya ciudadanía se le concede al año siguiente- donde fue designado Primer Piloto Mayor en la Casa de Contratación de Sevilla (1508).
e) Es de destacar que –a contrario de lo que se afirma en el artículo- Waldsemüller no sólo propuso sino que también fundamentó con amplitud su sugerencia de denominar “América” al nuevo continente, en el capítulo XI de su citada obra. Y lo hizo del siguiente modo:
“Verdaderamente que ahora que estas regiones han sido exploradas más extensamente, y ha sido descubierta por Americus Vesputius otra parte del mundo, como puede verse por las adjuntas cartas, no veo ningún motivo para que no se llame a ésta con justicia Amerigen –es decir tierra de Americu- o América, por su descubridor, hombre de sagaz ingenio, así como Europa y Asia han recibido nombre de mujeres”
[6].
f) Su propuesta fue inmediatamente aceptada en casi todas partes –como lo demuestra un mapamundi publicado en Estrasburgo en 1509, en el cual ya figura el nombre “América”- con excepción de España (que mantuvo, hasta el siglo XVIII, las denominaciones de “Indias Occidentales” o “Indias”).

g) Y ello, a pesar de que Waldsemüller –al enterarse que el descubridor había sido Colón- cambió en 1513 su propuesta por el de “Terra Incógnita” (“tierra desconocida”), que no tuvo éxito.
h) Recientemente, el famoso mapa –que aquí se reproduce- fue subastado por la casa Christie´s de Londres en más de un millón de dólares, cifra que constituye un precio record para los impresos en una sola hoja.
i) En conclusión: la hipótesis sostenida en el mentado artículo constituye una curiosa fantasía, totalmente desmentida por la verdad histórica (como confiamos en haber demostrado).


* Doctor en Derecho y Ciencias Sociales y Profesor de “Historia del Derecho” en la Facultad de Derecho de la Pontificia Universidad Católica Argentina (Subsede Paraná).
[1] "El Diario"- Paraná,Primera sección, pág. 8, y cuyo autor es el periodista Fernando del Corro.
[2] Que se editaría en 1507. Confr. “Manual de Historia de la civilización argentina” (“preparado con los materiales de la Sección Historia de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires y con la cooperación de sus miembros: Luis María Torres, Rómulo D. Carbia, Emilio Ravignani y Diego Luis Molinari”); Tomo I; Franzetti y Cía. Editores; Buenos Aires, 1917; “Las exploraciones”; Nº 21; pág. 275 y sigtes.
[3] Idem. Otros autores sostienen que la publicación se efectuó en 1502 o 1504.
[4] Hoy se sabe que no dirigió esta expedición, al servicio de Portugal. Es de hacer notar que, en 1826, el Vizconde de Santarem tachó de falso lo que relata Vespucio de sus viajes.
[5] Dicha carta fue traducida a varios idiomas y la noticia se expandió rápidamente.
[6] Op. cit., pág. 278. No es de extrañar que supusiese que Vespucio era el descubridor, ya que el florentino jamás dio los nombres de los jefes de las expediciones que dijo haber integrado.

5 Comments:

Blogger Roberto Iza Valdés said...

Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.

12:50 a.m.  
Blogger Roberto Iza Valdés said...

Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.

7:23 p.m.  
Blogger Roberto Iza Valdés said...

Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.

3:21 p.m.  
Anonymous Anónimo said...

Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.

6:12 p.m.  
Blogger Unknown said...

Este comentario ha sido eliminado por el autor.

8:52 a.m.  

Publicar un comentario

<< Home